La presidenta de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán, anunció un acuerdo de colaboración entre el Poder Legislativo y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para realizar un conversatorio conmemorativo por el 80 aniversario del organismo internacional. Este evento, que tendrá lugar en el Palacio Legislativo de San Lázaro, simboliza el refrendo del compromiso de México con el multilateralismo y la cooperación global. El anuncio se dio tras la reunión de la legisladora con el Coordinador Residente de la ONU en México, Peter Grohman.
López Rabadán subrayó que la Cámara de Diputados acompañará esta celebración no solo como un acto protocolario, sino visibilizando la profunda trascendencia de un organismo multilateral como la ONU. Sostuvo que estas instituciones trascienden ideologías y gobiernos temporales, destacando su papel crucial en regiones como América Latina para combatir la pobreza, construir sociedades más igualitarias y proteger los derechos humanos de todos los ciudadanos. “Más allá de los partidos, más allá de los colores, hoy México sigue siendo muy importante para la ONU”, insistió, recalcando la necesidad de encontrar “puntos de encuentro entre tanta polarización, entre tanta división”.
Frente a la pregunta sobre las críticas de políticos de otros partidos hacia el relanzamiento del Partido Acción Nacional, la presidenta de la Mesa Directiva manifestó que tales reacciones evidencian una preocupación excesiva. Enfatizó que el enfoque de gobierno y legisladores debería estar puesto en resolver los problemas concretos de los mexicanos. “Para eso le pagan al gobierno, para eso le pagan los ciudadanos a sus diputadas y diputados; para eso nos pagan, para buscar resultados (…) lo otro es politiquería”, subrayó con contundencia.
En ese sentido, hizo un llamado a la templanza y la sensatez de los actores políticos, defendiendo el derecho de toda organización a expresarse, fijar posiciones e incluso a que los ciudadanos creen nuevas fuerzas políticas, pues eso, afirmó, es la esencia de la democracia. Finalmente, abordó un tema de profunda ética pública al referirse a las críticas desmedidas, advirtiendo que “lastimar a alguien que no puede defenderse en las mismas circunstancias es abusar de los micrófonos”. Concluyó señalando que este tipo de acciones no solo son ilegales, sino que transgreden la ética y son, en el fondo, inmorales, tanto en la vida como en la política.
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