Por Juan Pablo Ojeda
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) dio luz verde a una de las operaciones financieras más delicadas del año: la adquisición del negocio fiduciario de CIBanco por parte del Grupo Financiero Multiva. La autorización, publicada en el Diario Oficial de la Federación, confirma que no existen impedimentos legales para la fusión entre Banco Multiva y la sociedad que resultó de la escisión de CIBanco el pasado 26 de agosto.
Según Hacienda, la operación no solo pasa el filtro jurídico, sino que también cuenta con el respaldo técnico de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y del Banco de México (Banxico). Ambas instituciones emitieron opiniones favorables desde sus áreas de Regulación, Supervisión, Autorizaciones y Sanciones. Adicionalmente, la Coordinación de Análisis Financiero y Vinculación Internacional consideró que la compra no representa riesgos desde el punto de vista financiero.
La decisión se da en un contexto complejo para CIBanco, institución que junto con Intercam y Vector Casa de Bolsa fue señalada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos a finales de junio por presuntamente facilitar operaciones de lavado de dinero vinculadas al tráfico de opioides, específicamente fentanilo. Las acusaciones desataron un efecto dominó: afectaciones operativas, pérdida de confianza y la necesidad de desincorporar áreas clave de negocio.
En medio de esa turbulencia, Multiva —propiedad de Grupo Vazol, encabezado por Olegario Vázquez Aldir— anunció el 19 de agosto un acuerdo para adquirir el negocio fiduciario de CIBanco, uno de los activos más relevantes de la institución sancionada. La transacción se cerró con éxito el 5 de septiembre, marcando el primer gran movimiento en la reconfiguración del sector tras el escándalo internacional.
El caso no se detuvo ahí. El 1 de octubre, Vector Casa de Bolsa y las propias CIBanco e Intercam acordaron con Finamex el traspaso de cuentas de inversión y la venta de su operadora de fondos, en un intento por contener riesgos y cumplir con las exigencias regulatorias. Y el 10 de octubre, la CNBV dio el golpe definitivo: revocó a CIBanco la autorización para operar como institución financiera.
Con la compra autorizada por Hacienda, Multiva fortalece su posición en el sector fiduciario justo cuando el mercado mexicano vive una reacomodación forzada por las investigaciones de Estados Unidos. Para el sistema financiero, la señal es doble: la supervisión internacional pesa, pero también hay jugadores dispuestos a absorber activos valiosos y dar continuidad a servicios clave en medio de la tormenta.
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