Por Juan Pablo Ojeda
A pocos días del arranque del Apertura 2025, los Pumas de la UNAM están a punto de enfrentarse a un problemón: podrían quedarse sin su portero titular, Alex Padilla. Y no por una lesión ni por bajo rendimiento, sino porque desde España, el Athletic Club de Bilbao quiere que el joven arquero regrese de inmediato.
Sí, el mismo Padilla que parecía ya consolidado como parte del proyecto universitario. Resulta que el Athletic, dueño de sus derechos federativos hasta 2029, incluyó una cláusula en la cesión que le permite pedir su regreso en cualquier momento. Así de claro. Y ahora, con Julen Agirrezabala (el suplente de Unai Simón) a punto de firmar con el Valencia, los vascos activaron esa cláusula. Necesitan portero ya, y ven en Padilla a su reemplazo natural.
Según el periodista Carlos Ponce de León, el trato con los Pumas incluía un pago de 300 mil euros en caso de romper el préstamo, cifra que el club español estaría dispuesto a desembolsar sin problema. Desde España incluso aseguran que ya le avisaron al entorno del jugador. El detalle es que en la oficina de la UNAM nadie ha recibido notificación oficial. Sí, todo apunta a que el portero ya tiene un pie en Bilbao, pero en Ciudad Universitaria aún no saben nada… al menos de forma formal.
¿Y entonces? ¿Quién se pone los guantes en la jornada 1?
Los únicos arqueros disponibles en el plantel son Pablo Lara y Miguel Paul, ambos surgidos de la cantera. Lara, con algo más de experiencia, debutó en Primera División y jugó las primeras cinco fechas del Clausura 2025, aunque le metieron nueve goles en ese lapso. A pesar del dato, es el que más confianza genera por ahora en el cuerpo técnico.
Para Pumas, este movimiento cae como balde de agua fría. Justo cuando parecía que tenían portería resuelta por al menos un año más, ahora deben improvisar, confiar en la cantera y posiblemente salir al mercado… si es que todavía hay tiempo.
Por ahora, la novela sigue abierta. Pero si nada cambia en las próximas horas, Padilla hará las maletas y Pumas tendrá que arrancar el torneo apostando todo a su cantera. La pregunta no es solo quién va a atajar… sino si estará a la altura.
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